Rodeada de campos y frutales, a las afueras de un típico pueblo ampurdanés, en Girona, encontramos una masía de 900m² construidos que se divide en un laberinto de estancias encadenadas entre sí. Un conjunto de salones, comedores y diversas habitaciones abiertas al exterior por patios y ventanas, que tras la rehabilitación se le han añadido nuevos pasos de circulación hacia estancias que antiguamente permanecían asiladas de luz y ventilación, con la voluntad de potenciar el carácter laberíntico de la casa, complejidad que paradójicamente facilita el uso y la delimitación de los distintos espacios de los que consta esta vivienda.
La construcción constaba de dos casas unidas que al igual que todas las masías de la zona, fueron construidas en su época sobre roca, lo que hizo que la planta baja de la vivienda se adaptara a las pendientes el terreno, un caos de estancias contiguas que denotaba diversas ampliaciones a lo largo del tiempo, algunos con pasado agrícola y otros de uso doméstico. En este aspecto, la intervención, a cargo del equipo de ARQUITECTURA-G se ejecuta con tal de conservar toda la estructura muraría de la casa pero limpiándola de tabiques, conectando estancias entre sí con tal de que todas tengan apertura hacia el exterior.
El resultado es una casa de infinidad de estancias donde la familia y sus frecuentes invitados pueden habitar sin sentir la necesidad de abandonar el interior, en un laberinto de diferentes estancias y patios de luz tamizada donde poder descansar, comer, trabajar, echar siestas, leer y nadar.
La baldosa vidriada de color marrón sirve de hilo conductor entre la cocina y las diversas zonas comunes, en donde cada estancia ha sido diseñada con su propio mobiliario construido en obra y revestido con esta llamativa pieza de cerámica. Los suelos, característicos de la zona; de resilla de color rojo, han sido recuperados, en donde el trazo del tiempo es visible en contraste con el pulcro reflejo de la nueva cerámica.
“La baldosa vidriada de color marrón sirve de hilo conductor entre la cocina y las diversas zonas comunes. […]”
En el exterior, todos los apeos en la estructura muraría de la casa se ejecutan mediante perfilería de acero oculta en la piedra. Tanto la estructura metálica, como la celosía que delimita el interior del exterior se ha pintado en color burdeos,del mismo modo que las puertas y las ventanas, con tal de que se identifique fácilmente la intervención actual respecto a los elementos originarios de la construcción.
Me encanta el Empordà… todas sus casas son maravillosas… pero este proyecto… la masia entera tiene un encanto especial!!!! me la quedaría ahora mismimimiitoooo!!!
feliz lunes guapa!!!
bss
¡Qué preciosidad! Es espectacular, esas paredes de piedra, esos suelos, la piscina… :)
¡Besotes!
Espectacular. Belleza y simplicidad unidas dan como resultado esta maravilla.